Quien cultiva la ociosidad, forma nieve en torno de sí.
Quien sustenta el vicio, encarcélese en el.
Quien se encoleriza, lanza piedras sobre sí mismo.
Quien provoca situaciones difíciles, aumenta los obstáculos.
Quien se precipita en juzgar, es analizado de prisa.
Quien se especializa en la identificación del mal, difícilmente ve el bien.
Quien no quiere soportar, es incapaz de servir.
Quien vive coleccionando lamentaciones, camina bajo una lluvia de lagrimas.
Francisco C Xavier