martes, 29 de octubre de 2013

Frases con sabiduría...

Jackson Brown no es un gran pensador, ni un Nobel de literatura. Es solo un hombre común, un padre preocupado por la felicidad de su hijo que quiso escribir estos simples “consejos”, al momento que éste se iría a estudiar a la Universidad, lejos de su casa. Su hijo decidió fotocopiarlos y los distribuyó entre sus compañeros de estudio. Tuvieron tanto éxito, que una editorial le pidió autorización a Brown para editar un libro con ellos. Poco tiempo después, ampliado bajo el titulo “Vivir Feliz”, se convirtió en un Best Seller que lleva decenas de ediciones y millones de ejemplares traducidos a varios idiomas. 

Hijo:
  • Cásate con la persona correcta. De ésta decisión dependerá el 90% de tu felicidad o tu miseria.
  • Observa el amanecer por lo menos una vez al año.
  • Estrecha la mano con firmeza, y mira a la gente de frente a los ojos.
  • Ten un buen equipo de música.
  • Elige a un socio de la misma manera que elegirías a un compañero de tenis: busca que sea fuerte donde tú eres débil y viceversa.
  • Desconfía de los fanfarrones: nadie alardea de lo que le sobra.
  • Recuerda los cumpleaños de la gente que te importa.
  • Evita a las personas negativas; siempre tienen un problema para cada   solución.
  • Maneja autos que no sean muy caros, pero date el gusto de tener una buena casa.
  • Nunca existe una segunda oportunidad para causar una buena primera impresión.
  • No hagas comentarios sobre el peso de una persona, ni le digas a alguien que está perdiendo el pelo. Ya lo sabe.
  • Recuerda que se logra más de las personas por medio del estímulo que del reproche (dile al débil que es fuerte y lo verás hacer fuerza).
  • Nunca amenaces si no estás dispuesto a cumplir.
  • Muestra respeto extra por las personas que hacen el trabajo más pesado.
  • Haz lo que creas que sea correcto, sin importar lo que otros piensen.
  • Dale una mano a tu hijo cada vez que tengas la oportunidad. Llegará el momento en que ya no te dejará hacerlo.
  • Aprende a mirar a la gente desde sus sandalias y no desde las tuyas.
  • Ubica tus pretensiones en el marco de tus posibilidades.
  • Recuerda el viejo proverbio: Sin deudas, no hay peligros ni problemas.
  • No hay nada más difícil que responder a las preguntas de los necios.
  • Aprende a compartir con los demás y descubre la alegría de ser útil a tu prójimo. (El que no vive para servir, no sirve para vivir).
  • Acude a tus compromisos a tiempo. La puntualidad es el respeto por el tiempo ajeno.
  • Confía en la gente, pero cierra tu auto con llave.
  • Recuerda que el gran amor y el gran desafío incluyen también 'el gran riesgo'.
  • Nunca confundas riqueza con éxito.
  • No pierdas nunca el sentido del humor y aprende a reírte de tus propios defectos.
  • No esperes que otro sepa lo que quieres si no lo dices.
  • Aunque tengas una posición holgada, haz que tus hijos paguen parte de sus estudios.
  • Haz dos copias de las fotos que saques y envíalas a las personas que aparezcan en las fotos.
  • Trata a tus empleados con el mismo respeto con que tratas a tus clientes.
  • No olvides que el silencio es a veces la mejor respuesta.
  • No deseches una buena idea porque no te gusta de quien viene.
  • Nunca compres un colchón barato: nos pasamos la tercera parte nuestra vida encima de él.
  • No confundas confort con felicidad.
  • Nunca compres nada eléctrico en una feria artesanal.
  • Escucha el doble de lo que hablas (por eso tenemos dos oídos y una sola boca).
  • Cuando necesites un consejo profesional, pídelo a profesionales y no a amigos.
  • Aprende a distinguir quiénes son tus amigos y quiénes son tus enemigos.
  • Nunca envidies: la envidia es el homenaje que la mediocridad le rinde al talento.
  • Recuerda que la felicidad no es una meta sino un camino: disfruta mientras lo recorres.
  • Si no quieres sentirte frustrado, no te pongas metas imposibles.
  • La gente más feliz no necesariamente tiene lo mejor de todo.

Convertirte en la persona “Mil por Ciento”_ Christian Betancur B.


"Como nos relata la 'Parábola de los Talentos' (San Mateo, 25: 14-30), tenemos la obligación de usar
e incrementar cualquier cosa que Dios nos haya dado. Y, si lo hacemos así, se nos dará más".
Mary Kay Ash


"Llegándose el que había recibido cinco talentos, presentó otros cinco, diciendo: 'Señor, cinco
talentos me entregaste; aquí tienes otros cinco que he ganado'. Su señor le dijo: '¡Bien, siervo bueno
y fiel!; en lo poco has sido fiel, al frente de lo mucho te pondré; entra en el gozo de tu señor' ".
Evangelio de San Mateo, 25: 20-21


¿Qué es lo que hace a un triunfador? ¿Qué características distinguen a un gran
deportista, a un artista destacado o a un brillante ejecutivo del común de los
mortales? Son muchas las respuestas que la humanidad ha tratado de dar a esta
pregunta definitiva.

Y es que nuestra primera responsabilidad en la vida es triunfar, o sea, conquistar
nuestras propias metas. Además, como jefes, como padres, como educadores,
como líderes, tenemos la sagrada misión de ayudar a otros a triunfar.


La pregunta también se podría plantear así: ¿Por qué hay seres humanos que
ganan muy poco, mientras la recompensa de otras personas con capacidades y
oportunidades similares se puede considerar suficiente, y en algunos casos
incluso muy alta? ¿Es que acaso la vida es injusta?

domingo, 27 de octubre de 2013

¿Cómo llega el vendedor Halcón a la cumbre?...


Por Christian Betancur y María Cristina Rodríguez de Betancur


1. Cultivando siempre el pensamiento positivo.
2. Siendo honesto consigo mismo y con los demás.
3. Llenándose de entusiasmo, y contagiándolo a todos.
4. Entendiendo a los otros, con sincera empatía ...y viviendo un amor profundo por ellos.
5. Conociendo sus productos y los de sus competidores ...pero mirándolos con los ojos de su cliente.


6. Enriqueciendo su inteligencia y agudizando su mente para buscar las verdades sencillas y profundas.
7. Analizando con detalle los problemas complejos,sin perder la visión del conjunto, que les da sentido.
8. Mejorando su expresión verbal y su tono de voz.
9. Cuidando su expresión corporal y su presentación.
10. Desarrollando una gran seguridad y confianza en sí.


11. Proponiéndose altas metas personales y profesionales,e inspirándose día a día en su lucha por alcanzarlas.
12. Planeando cuidadosamente su tiempo y sus actividades.
13. Trabajando duro, pero organizadamente.
14. Descansando bien. Relajando su mente y su cuerpo.
15. Viviendo a Dios en cada venta... y en su vida.

viernes, 25 de octubre de 2013

La experiencia que traen los años no es reemplazable con nueva información que otorguen las aulas...

La experiencia no se improvisa
Julio Arrastía Brica

Lastimosamente hoy se cree que las personas son como los computadores, que cada vez puedes adquirir unos más poderosos, más versátiles, con mayores capacidades de procesamiento y de almacenamiento y más baratos.
Cierto en parte. Hoy un profesional recién egresado, ha recibido en las aulas información más actual que la que pueda haber recibido en su momento un egresado de hace varios años y por su exposición a nuevas tecnologías también es posible que tenga más virtudes en ese sentido. Y, lastimosamente, también es mucho más barato pagarle sueldos casi ridículos a un recién egresado, que pagarle sueldos algo dignos a una persona con experiencia.

Que la historia no se repite y que la sangre nueva aporta conocimientos innovadores y libres de mañas, vicios y prejuicios, también es relativamente cierto pero cada vez menos, porque las personas con experiencia hoy entienden que la actualización debe ser parte de la rutina inteligente de un triunfador y que la apertura mental y la humildad para recibir nuevos conocimientos también lo es.
Lo que hasta ahora no es posible con las personas, es lo que sí es posible en los computadores: trasladar la información del disco duro de los aparatos viejos al disco duro del nuevo equipo. Y quienes saben de tecnología saben que más importante que cualquier equipo (que cada vez se consiguen mejores y más baratos) es la información que tiene en su disco duro.
Las empresas desechan la experiencia, y como mucha gracia conservan a los “desechados” como asesores parciales. Pero como estos son ahora libres para vender su conocimiento, y su conocimiento no es otro que el que llevó a progresar a su empresa, ahora estará disponible, de manera fácil y barata para su competidor.
Conservar la experiencia es barato a cualquier costo.
@carlossierra57

jueves, 24 de octubre de 2013

Generaciones H_ Carlosierra

Desde hace varios años, de manera poco original en los ámbitos del mercadeo, desde los Baby Boomers se han venido bautizando las generaciones, una tras otra. Hemos pasado por las generaciones X, Y, G, etc.
Bueno, cayendo en la poca originalidad, de ahora en adelante, por consecuencia lógica de la evolución del ser humano (más que por la evolución del mercadeo que al fin y al cabo evoluciona por la evolución de las personas) deberemos hablar de las generaciones H, las cuales con seguridad evolucionaran desde la H1, pasando por las H2, H3, etc. Hasta llegar a la Hn.
Somos testigos privilegiados de la evolución del ser humano hacia lo HUMANISTA, y de ahí es que sale la H de las generaciones venideras. Tendremos, y ya vemos las evidencias de ese comportamiento, seres humanos más sensibles, con hambre de amor, preocupados por la paz mundial, dispuestos a borrar fronteras ideológicas, culturales e incluso políticas.
Tendremos seres humanos (y ya los tenemos) más amorosos en todas sus relaciones, más preocupados por el medio ambiente, que trascienden la generosidad y pasan al humanismo integral que incluye el análisis de las derivaciones de los hechos. Que no solo son generosos por conveniencia, sino que son humanos por convicción. Seres humanos más espirituales, más tolerantes con las diferencias, con la diversidad, más vinculados con otros seres vivientes, más conscientes del daño o beneficio consecuente de sus actos y relaciones.
El humanismo pasa de ser una alternativa de pensamiento discutible y provocadora, a ser la única opción para mejorar al ser humano, a su universo y a su universalidad.
El Mercadeo a partir de este momento, es para las generaciones H. Estamos en el nacimiento de la generación H1

sábado, 19 de octubre de 2013

Recordando Mario Benedetti"... A través de los poemas pasa la historia de nuestros pueblos"


-¿Por qué tantos escritores ponderan la poesía como el género de los géneros?
-No lo sé. Yo creo que la poesía tiene un privilegio.A través de los poemas pasa la historia de nuestros pueblos. Si uno mira hacia atrás recuerda a Homero, Virgilio, Dante. Es más difícil recordar a los prosistas. Los poetas -no aquellos clásicos- tienen menos presiones de editores, de sectores políticos y sociales y están más libres para opinar sobre lo que pasa a su alrededor. A través de ellos es más fácil detectar el desarrollo de la humanidad.


-¿Es usted consciente de cuántas personas se han enamorado leyendo sus poemas?
(Sonríe) -Es un misterio. Tengo una anécdota de Guadalajara, México, donde fuimos con Daniel Viglietti a dar un recital. Al terminar, se acercó una pareja con un ejemplar de mi libro "Inventario" y me contó que habían estado casados, que mantenían una amistad y se habían conocido por ese libro. Al tercer día volvieron y me confesaron que, luego de releer "Inventario", habían decidido reconciliarse. Son las cosas más estimulantes que me han pasado.


-¿La poesía lo aproximó más a los jóvenes?
-Los jóvenes se han acercado más a mi poesía que a mi prosa. Y aún no he descubierto por qué. Me siguen mucho en España y en México. Para el autor, la poesía es un desahogo de su intimidad, de sus amores, de sus preocupaciones. Esa expresión de intimidad alude, sin quererlo, a la del lector. En la poesía se da un intercambio de intimidad a intimidad. Con la prosa pasa menos.


-¿Se considera poeta?
-Yo me considero más poeta que novelista. Ser poeta fue, desde niño, mi vocación más firme. Es el género en que me comunico mejor y más a menudo. Siempre estuve muy influido por la realidad. Eso ha ocurrido con muchos poetas de mi generación en América latina, donde tenemos una realidad muy apremiante.


-¿Cuáles son sus poetas latinoamericanos preferidos?
-Influyó en mí en un sentido estricto el peruano César Vallejo. El inventaba palabras cuando no las encontraba en el diccionario. Y eso hice en "El cumpleaños de Juan Angel", mi novela en verso. Hay muchos poetas que leo con frecuencia: José Emilio Pacheco, Jaime Sabines, Baldomero Fernández Moreno, Paco Urondo, Oliverio Girondo, Juan Gelman.


-¿Pensó alguna vez ser alguien distinto de un poeta?
-Bueno, he sido muchas cosas. Viví muchos años de mi oficio de taquígrafo. He vendido libros, alfombras, repuestos de automóviles. Fui empleado público durante cinco años y otros quince trabajé en una inmobiliaria. Cuando me casé tenía tres empleos. Y sólo en los últimos años he podido vivir de mis libros.


-¿Se lee menos poesía en el escenario global en que vivimos?
-En general se lee menos. La poesía ha debido ganar su espacio a contrapelo. Pero cuando lo obtiene, se queda. Es muy difícil que un lector tocado por la poesía abandone el género.


-¿Escribir "El mundo que respiro" fue una necesidad?
-Forma un bloque con "El olvido está lleno de memoria" y "La vida, ese paréntesis". Son poemas más existenciales y menos invadidos por lo político. Este libro toca la muerte y los problemas que la rodean. Es una manera de no esquivarles el bulto a las cosas preocupantes.


Por Susana Reinoso
De la Redacción de La Nación

jueves, 17 de octubre de 2013

martes, 15 de octubre de 2013

viernes, 11 de octubre de 2013

jueves, 10 de octubre de 2013

domingo, 6 de octubre de 2013

Cómo utilizar la Perceptología comercial en las empresas...


Mis políticas como cliente_ Carlosierra, Propuesta.



Artículo I. Estás políticas estarán exhibidas permanentemente  y cual sea la  forma de exhibición tendrá la misma validez de la que la empresa utilice para la difusión de las suyas.

Artículo II. Éstas políticas también se podrán exhibir, opcionalmente, en el instante inmediato siguiente a aquel en que la empresa me exhiba las suyas. Las mías, ajustadas a la ley, tendrán tanta validez, como las ajustadas a la ley que la empresa exhiba.

Artículo III. Éstas políticas tienen como objeto hacer valer los derechos míos o de otros, como cliente(s) de la empresa y hacer que ésta esté consciente de sus deberes para conmigo (con nosotros). Velando por respetar los derechos de la empresa, y permitiendo a ella el cumplimiento de sus deberes y custodiando el cumplimiento de los que por ley y por contrato hecho en mi pleno conocimiento, yo deba asumir.

Artículo IV. Todas las políticas expuestas por mí, Siempre, deben acatar las leyes de la república de Colombia. Prevaleciendo éstas sobre aquellas. Presumo, de buena fe, que las políticas de las empresas con las que yo negocie, están ajustadas a dichas leyes.

Artículo V. En estas políticas planteo abstenerme de negociar con empresas que adopten cierto tipo de prácticas, pero si por ignorancia desconozco las prácticas de la empresa y llego a negociar con ellas, podré de todos modos hacer valer estas políticas en el momento en que obtenga la información que me pudo haber llevado a actuar de manera diferente desde un principio si hubiera conocido a tiempo dicha información.

Artículo VI. Sólo negociaré con empresas que actúen en forma honesta, transparente y no engañosa conmigo. Si por ignorancia del hecho engañoso, de buena fe hago alguna negociación en otros términos, tendré derecho a la devolución íntegra de mi dinero al valor presente del momento de la restitución o a la satisfacción con un hecho plenamente reparador y satisfactorio para mí, una vez yo reclame a la empresa, en el menor tiempo posible, plazo que será debidamente acordado conmigo o establecido por un perito experto conocedor del asunto y aceptado por mí.

Artículo VII. Sólo negociaré con empresas que actúen en forma transparente, honesta y no engañosa o dañosa con sus proveedores, sus empleados, sus competidores o colegas, la sociedad, el estado, las autoridades, la naturaleza, la comunidad o el mundo en general o con cualquier individuo en particular. Si por ignorancia de esa situación, de buena fe hago alguna negociación en otros términos, tendré derecho a la devolución de mi dinero o a la satisfacción con un hecho plenamente reparador y satisfactorio para mí, una vez yo reclame a la empresa.

Artículo VIII. Me abstendré de negociar con empresas que en medio de un malentendido “colegaje” o compañerismo, se conviertan en cómplices activos o pasivos del engaño, daño o perjuicio que por cualquier motivo un colega suyo cause a sus proveedores, a sus empleados, a sus competidores o colegas, a la sociedad, al estado, a las autoridades, a la naturaleza, a la comunidad o al mundo en general o a cualquier individuo en particular.

Artículo IX. Podré, sobre hechos objetivamente ciertos y demostrables y por medios legales, difundir a otros de forma legal, ética y ceñida a la buena moral, las situaciones de engaño, daño o complicidad en las que la empresa incurra, con el propósito de que esa empresa mejore su responsabilidad social.

Artículo X. Podré reportar la empresa, a las bases de datos establecidas o que se establezcan para tal fin, cuando ella cometa actos que signifiquen situaciones de engaño o daño, con el fin de prevenir a la sociedad.

viernes, 4 de octubre de 2013

Las políticas del cliente, Por Carlos Sierra…


Es muy normal que en empresas industriales, comerciales, de servicios y otras, se formulen las políticas que deben regir las relaciones de ellas con sus clientes.


Lo curioso, en la mayoría de las veces, es que dichas políticas son redactadas a espaldas de los individuos que componen el mercado, y en buen número de casos establecen condiciones leoninas a manera de contrato de adhesión desconocido por los clientes, por lo menos hasta el momento de presentarse un conflicto de estos con la empresa.


Siempre, en este momento, a manera de escudo protector para la empresa, cuando los empleados de ella ya no saben que hacer para “defender” a la empresa del cliente (que en ese momento es considerado más un enemigo que un cliente), dice el empleado de turno: 

“Esas son las políticas de la empresa”. Como quien dice: “ya no podemos hacer nada” y giran hacia usted, por primera vez, un “hablador” dispuesto sobre un escritorio con un gran título y con un texto en letra menuda que dice: “Políticas de la empresa”.


Ante esto, el ignorante cliente, es abusado. Y el cliente conocedor de la posible ilegalidad del asunto es calificado de conflictivo.


Yo planteo, que para evitar problemas y favorecer la armonía, todas las empresas se den por enteradas de que todos los clientes tenemos derecho a nuestras políticas. 



El uso a darle a estas políticas será para equilibrar armónicamente las relaciones Empresa-Cliente...

jueves, 3 de octubre de 2013