Buenas Nuevas de Carlos Sierra
La Perceptología Comercial propugna, entre otras cosas, por:
- El objetivo de la organización no es obtener ganancias. Esa es una consecuencia de hacer propio el objetivo del cliente, para ayudárselo a lograr con nuestro producto-servicio y con nuestra asesoría.
- La organización debe mejorar, mejorando a todos los públicos que se interrelacionan con ella.
- La satisfacción per se no es el objetivo del servicio al cliente. Lo es la satisfacción fundamentada en la confianza: “La confianza vende lo que la dicha no alcanza”.
- El servidor y la organización, deben apuntar al mismo camino que los conduzca a un destino común a ambos durante un trayecto común. Ambos pueden tener destinos finales diferentes, pero deben tener un trayecto común en el camino que les justifique viajar juntos.
- Cada persona en la organización debe transitar por el camino a la felicidad, si no es así, ¿cuál podrá ser el servicio que prestarán a los clientes? El servicio nace del alma y significa felicidad mejorando al otro. Si no soy feliz, ¿qué felicidad podré compartir? La felicidad es como el amor y el dinero: mientras más se comparta generosamente, más se tiene.
- La organización no debe ver a quien hace la misma actividad o a quien proporciona los mismos productos-servicios como a un competidor, sino como a un colega. Debe ser consciente de que no necesita competidores para vencer sino colegas para construir un mejor mercado.
- La organización no oculta información o conocimiento que desarrolle mejor al mercado. La comparte.
- A la organización no le preocupa ser LA mejor. Simplemente se ocupa por ser mejor. Mejor cada vez.
- La organización no compite. Simplemente se ocupa por ganar tanto como pueda y no se mortifica si otros ganan más.
- La organización no se preocupa por aumentar la participación en el mercado. Se ocupa de crecer en cifras absolutas, para extender y profundizar cada vez los beneficios que ofrece al mercado.
- La organización no considera que el buen servicio sea un negocio. Lo que dispone es el negocio al servicio de los públicos con los que interactúa. Ya lo dijimos: la utilidad es consecuencia.
- La organización está cargada de afecto en todas las acciones de sus servidores (colaboradores o empleados).
- La organización promueve el trabajo en comunidad por encima del trabajo en equipo.
- La organización evolucionó de tener vendedores a tener asesores en compras para sus clientes.
- La organización sabe que está obligada a ser cada día mejor independiente de si tiene o no colegas.
- La organización sabe que no se debe ocupar en crear necesidades sino en llenar los vacíos de las que ya existen.
- Los negocios deben pasar de la fórmula Gana-Gana a la fórmula Gana-Todos.
Esto, no más esto, es lo que haría que su empresa fuera amada por sus clientes. Pero cuidado, si busca ser amada, la cuestión no funciona. Curioso, pero hágalo buscando ser amado y fracasará.
Usted sólo tiene que amar. Amar a sus clientes, amar a sus colaboradores, amar a sus proveedores, amar lo que hace por sus clientes y por los demás públicos. Amar. Como dijo San Francisco de Asís: “Que no busque ser amado, sino amar”.
Bueno. A los que esto les suena romántico y alejado del mundo de los negocios…les deseo mucha suerte. Claro que en los negocios no es que valga mucho la suerte. CASS
No hay comentarios:
Publicar un comentario