Según las más recientes cifras de la Asociación de Centros Comerciales de Colombia (Acecolombia), al cierre del año pasado 55 municipios ya contaban con al menos un complejo de este tipo (hace siete años estos se concentraban en 16 ciudades), y esa estadística crecerá en 2015: de los 75 proyectos que se desarrollan en la actualidad, 38 de ellos están en 24 ciudades intermedias.
Al cierre de 2014, afirma Acecolombia, en el país había 196 centros comerciales (con áreas superiores a los 5.000 metros cuadrados). En 2003 solo funcionaban 60.
Carlos Hernán Betancourt Sanclemente, director ejecutivo de Acecolombia, informa que en los últimos cuatro años el área comercial alquilable ha crecido 550 por ciento en las ciudades de menos de un millón de habitantes, como Yopal, Barrancabermeja, Pitalito, Funza, Montería y Florencia, lo que demuestra la dinámica de la industria en ese tipo de poblaciones.
“La Industria de centros comerciales se encuentra en franco desarrollo y atravesando uno de sus mejores momentos en el país, que ha tenido un destacado crecimiento económico y es por eso que está hoy en el mapa mundial, porque tenemos potencial, capacidad y recursos y nos hemos convertido en el destino de las inversiones mundiales porque aumentamos la clase media, duplicamos la clase alta y hemos logrado reducir la pobreza. Esto, por supuesto, se refleja en todas las ciudades”, asegura Betancourt.
Esos elementos, apunta el dirigente gremial, han sido factor clave para que la industria crezca y esa dinámica se mantenga y permita augurar que en el futuro próximo la tendencia se eleve, especialmente en las ciudades intermedias, donde los centros comerciales se adaptan a las necesidades y requerimientos de esas poblaciones.
“Las ciudades intermedias –subraya Betancourt– son hoy en el país el terreno de mayor expansión comercial. Las casi dos terceras partes de los nuevos proyectos se están llevando a cabo en estas zonas”.
La Estación Centro Comercial, Ibagué.
Para la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), desde 2009 en el país se ha presentado una tendencia a construir los llamados power center, que son centros comerciales con más de 80 mil metros cuadrados que llegan a tener hasta dos o tres locales ancla, multiplicidad de servicios (locales, cines, gimnasios y hoteles, etc.).
Según las cifras de este gremio, 4 por ciento de los complejos que hay en el país, que ellos estiman en 480 (contemplan todas las áreas), son de este tipo.
Guillermo Botero Nieto, presidente de Fenalco, asegura que en el país también se están construyendo centros comerciales conocidos como Lifestyle y outlet, dedicados, el primero, al entretenimiento, y el segundo, a descuentos y promociones permanentes.
“Este auge de centros comerciales es importante porque contribuyen a la formalización de la economía y son núcleos de desarrollo local. Su construcción en ciudades intermedias y pequeñas como Sincelejo, Popayán, Barrancabermeja, por mencionar unas pocas, es señal de credibilidad en la ciudad y genera un impulso notable de decoración, remodelación, moda y nueva oferta gastronómica”, asegura Botero.
El urbanista José Fernando Plazas Vanegas afirma que cada vez más en ciudades pequeñas o intermedias se inauguran complejos comerciales.
“La expansión se está dando en esas poblaciones. Solo por poner un ejemplo –apunta Plazas–, de los proyectos que empezaron a ejecutarse el año pasado, 60 por ciento estaban en ciudades intermedias. Se trataba de complejos entre 5.000 y 20.000 metros cuadrados con un almacén o supermercado ancla”.
Las razones
El arquitecto Mauricio Oliveros Chacón, quien ha participado en la concepción de centros comerciales en el centro del país, asegura que las ciudades intermedias son el terreno propicio para que haya más centros comerciales, por los beneficios que traen.
“Como no hay de estos complejos, el tenerlos es una aspiración de toda una población, pues de alguna forma son sinónimo de progreso, planeación urbana y dinamismo comercial”, asegura Oliveros, quien acota que estas construcciones son polo de desarrollo y de renovación urbana. “Indudablemente son motores de transformación, pues donde se erigen mejoran el sector, hay más seguridad y orden”.
En esto coincide Álvaro Fernando Vega Rapalino, asesor inmobiliario de Barrancabermeja. Con la construcción del centro comercial San Silvestre, asegura, la dinámica de la ciudad cambio y los consumidores de esta ciudad con una economía en crecimiento, tienen mayores posibilidades para realizar sus compras en un solo lugar. “Era –dice– algo que la comunidad esperaba”.
En esa misma línea, Lina Hurtado, gerente de centros comerciales de la firma Conconcreto, asegura que la idea al concebir proyectos en ciudades intermedias es desarrollar nuevos puntos de encuentro, al tiempo que llenar un vacío existente de formatos de comercio y entretenimiento.
Tal es el potencial de las ciudades intermedias en esta industria que Pedro Gómez & Compañía, una de las pioneras en los centros comerciales en el país, (construyó en 1976 Unicentro en Bogotá) este año llegará a 25 complejos construidos en Colombia.
Es así que hoy ya tiene 16 Unicentros, 12 de ellos en ciudades intermedias, y avanzan con el formato Mi Centro, también en localidades de ese tipo.
¿Y el futuro?
Para el gremio de centros comerciales, por ahora no hay obstáculos para el crecimiento de la industria en Colombia.
El sector seguirá creciendo gracias a la llegada de nuevos desarrolladores, la entrada de marcas globales y la expansión de las nacionales, oportunidades que permitirán nuevos desarrollos en muchas ciudades.
Acqua Power Center, Ibagué
Solo este año se ejecutan 75 nuevos proyectos, que serán inaugurados en los próximos cuatro años, es decir, cerca del 40 por ciento de los que hoy funcionan.
A esto se suma que los centros comerciales tradicionales se están modernizando y revitalizando su oferta: hoy se efectúan 37 proyectos de ampliación y/o remodelación.
Fuente: http://america-retail.com/estudios-consumidores/las-claves-de-expansion-en-el-sector-las-ciudades-intermedias
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