Las personas, empresas, sociedades y culturas hemos olvidado este principio. La Perceptología Comercial nos invita a que lo retomemos para así ser mejores personas, hacer mejores empresas, construir mejores sociedades y edificar mejores culturas.
Cuando se logra entender que debemos estar compitiendo contra nosotros mismos más que contra otros, nos damos cuenta que el resultado es mejor para todos los involucrados. Esto se hace evidente con la analogía del corredor de carreras el cual, cuando busca mejorar su desempeño mejorando sus competencias en vez de tratar de torpedear el trabajo de sus competidores, logra mejores tiempos, menor desgaste y brindar un mejor espectáculo.
Para muchas empresas es y será difícil cambiar la forma de comercializar y mercadear sus productos. Tradicionalmente muchas, por no decir la mayoría de empresas, han recurrido al mercadeo de guerra. Como la misma guerra agresiva y destructora que vemos hoy en día; esto sólo deja devastación.
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